AMYSA CHILE

Insectos de cama

un problema que puedes evitar

Aunque la mayor parte de las veinticuatro horas que conforman nuestro día a día nos mantenemos despiertos, lo cierto es que el sueño nos derrota en algún momento. Las habitaciones, que son espacios destinados a cuidar nuestro descanso, pueden albergar en los pliegues de sus colchones invitados indeseables. 

Los insectos de cama son criaturas diminutas, seres vivos cuya existencia oscila alrededor del medio centímetro, la mayoría de ellos expectantes al caer de la noche cuando la inconsciencia del sueño nos limita a proteger nuestro cuerpo.

¿Cómo saber si hay inquilinos en nuestro colchón, o en cualquier otro? ¿De qué forma nuestro cuerpo nos alerta de que algo pasa por las noches? Y, lo más importante: ¿cómo identificar los insectos de cama y prevenir —o deshacernos de— su presencia?


Tipos de insectos de puedes encontrar en tu cama

Las chinches son pequeños animales de color rojizo, sin alas, que tienden a ser el temor más grande —y reconocido— de este grupo. La forma en la que consiguen su alimento es picando la piel de seres humanos, o animales, para conseguir un poco de sangre e hincharse con ella. No obstante, también podemos encontrar: 

Pulgas

Cuando pensamos en pulgas, casi siempre pensamos en nuestros compañeros de vida —los perros— pero, ¿sabías que hay casi 2,000 especies de este pequeño insecto? Un insecto tan pequeño que no es identificable a simple vista, con una complexión que es capaz de soportar grandes presiones —quizá sería muy difícil que aplastaras uno por accidente—, puede saltar 200 veces su tamaño y trasmitir enfermedades como la peste bubónica, el tifus o las tenias.

Ácaros de polvo 

Si las pulgas son pequeñas y difíciles de identificar a simple vista, los ácaros son imposibles de encontrar. Pertenecientes a una especie de arácnidos, estos insectos pasan desapercibidos y, naturalmente, entorpecen su detección y posible eliminación. A pesar de que los ácaros son parte de nuestro sistema —hablando estrictamente de los ácaros de piel—, los de polvo pueden causar problemas en la salud de los seres humanos.

Garrapatas

Las garrapatas son un tipo de parásito que, al igual que las chinches y las pulgas, se alimentan de sangre caliente. Su naturaleza les demanda establecerse en lugares húmedos, y estos pueden encontrarse tanto dentro del hogar como fuera de este. De los insectos de cama, las garrapatas son uno de los huéspedes más peligrosos, pues son capaces de transmitir la enfermedad de Lyme, babesiosis, tularemia, encefalitis, entre otros.

No te compliques la tarea de identificación. Si encuentras puntos negros en movimiento, o despiertas con puntos rojizos o zonas de inflamación sin causa aparente; hay un problema. Solo levanta las sábanas, utiliza la linterna en tu celular y recuerda que estos insectos son especialistas en mantenerse encubiertos. Además, puedes encontrar manchas pequeñas y rojizas en las sábanas, fundas de las almohadas o el colchón —una señal de que las chinches han sido aplastadas—, machas oscuras —por el excremento de estas—, huevecillos y cáscaras diminutas y amarillentas.


Razones por las que puede haber insectos en tu cama


Los insectos de cama, o la mayoría de ellos, son grandes corredores. Por ende, es común que si la casa o el apartamento de a lado esté sufriendo un problema con algún tipo de peste, tarde o temprano haga presencia en tu propio hogar, por ende, procura sellar puntos de entrada como ventanas abiertas —usa mallas o mosquiteros—. 

Una segunda opción, igual de viable que la primera, es la compra de artículos usados, especialmente ropa, o muebles. La falta de higiene es una razón esperada, pero no está de más mencionar que la acumulación de basura tiende a ser responsable de la aparición de plagas, ¡hay que deshacernos de ella cada veinticuatro horas!

Por último, las mascotas son grandes portadoras de plagas. Seguir el calendario de vacunación para ellos, además de desinfectarlos habitualmente, evitarán que las posibilidades de visitantes indeseados disminuyan. 


Deshazte de los insectos de cama de esta manera

La prevención es preferida, por encima del lamento. Por ello, cuando realices turismo o compartas espacio con grandes multitudes, trabaja la costumbre de revisar las prendas que usaste aquel día y las pertenencias que llevabas contigo.

Los insectos de cama son portadores de enfermedades, pero no suelen ser transmisores, Aun así, la prevención y/o eliminación de ellos pueden mantenernos alejados de la lepra, brucelosis, etc. 

Estos pequeños seres vivos son incapaces de sobrevivir a altas temperaturas, por eso es recomendable realizar limpiezas a vapor tres veces a la semana. Si el problema ya está presente, el uso de insecticidas puede ser la mejor solución.


Productos caseros que marcan la diferencia

Estas cosas son fáciles de conseguir, en supermercados o en la despensa que no puede hacer falta para el buen funcionamiento del hogar. Hablamos de: ajo, clavos de olor, naranjas, limones, menta y alcohol.

Si mezclas los dos primeros: ajo con clavos de olor y un poco de agua, deberás dejar reposar un par de días, hidratar la mezcla nuevamente y utilizarlo como un atomizador sobre plantas y rincones. Por otro lado, la plantación de menta cerca de los puntos de entrada, como la puerta de entrada o las ventanas que conducen al exterior, evita la aparición de pulgas y garrapatas.

Retira la piel de las naranjas y los limones, colocarlos en armarios y alacenas también son un método eficaz para prevenir plagas. Por último, un poco de alcohol sobre cualquier nido de pagas acaba con ellas. ¡Inténtalo!